ROBERTO HERAS PARA CUANDO COMPITIENDO EN ENDURO MTB?
El cuatro veces campeón de La Vuelta a España, en ciclismo de ruta, una vez retirado se pasó a la competición con la mountain bike para disfrutar de terrenos mucho más divertidos y que requieren de una mayor técnica sobre la bicicleta.
Roberto Heras es bien conocido por el mundo de la bicicleta por sus grandiosos éxitos en la modalidad de ruta en este deporte. Sin embargo, poca gente sabe que, tras su retirada del mundo profesional, se ha estado dedicando a correr en la disciplina de montaña, en la que ha alcanzado cotas muy altas también.
Campeón de la Vuelta a España en cuatro ocasiones (2000, 2003, 2004 y 2005), el de Béjar fue uno de los hombres del momento en el ciclismo en ruta, que acostumbra desde hace algún tiempo a tener grandes dominadores que marcan una época.
De hecho, actualmente el dominio que en su momento tuvo Heras sobre una de las tres grandes vueltas, es comparable al de la figura de Chris Froome. El británico ha vencido en las tres grandes, es decir, el Tour de Francia, el Giro de Italia y en el que se estrenó en 2018 y la Vuelta, siendo especialmente amplio su palmarés en un Tour en el que cuenta con cuatro entorchados. Precisamente por esa razón es el favorito para ganar este año en París según Betway, que le da una cuota de 2,62 el día 29 de abril del 2019 si así pasa. Un nuevo éxito que le permitiría seguir agrandando una leyenda que ya se encuentra entre las mejores de esta modalidad.
De la retirada, rápidamente a la montaña
Una vez que Heras concluyó su etapa profesional, allá por el 2008, el salmantino decidió pasarse a las carreras de montaña, siendo claramente atraído por las características tan diferentes del estilo al que tenía que acogerse para triunfar en él. Y es que, la mountan bike y su competición pueden seducir hasta a los ciclistas más puros, como es este caso, entre otros.
Para ello necesitó aprender una nueva técnica a la hora de correr con su bicicleta por caminos mucho más bacheados y complicados que una simple carretera. Y es que, a pesar de ser considerado el mismo deporte, estas dos disciplinas tienen muy poco que ver, salvo que la principal herramienta es la misma.
Aunque, lo cierto es que un hombre de sus cualidades, ayudado por su gran forma física, pudo adaptarse relativamente rápido a la montaña, participando en carreras no profesionales de suma relevancia, como la Titan Desert, patrocinada por la empresa estadounidense Garmin desde hace algún tiempo.
El máximo ganador de la Titan Desert
Allí se impuso en cuatro ocasiones, 2008, 2010, 2011 y 2012, alcanzando la cota de tres victorias consecutivas, precisamente un récord que comparte con su anterior vida de ciclismo en ruta y La Vuelta a España, el cual intentará este año superar el catalán Josep Betalú, vencedor en 2016, 2017 y 2018.
Sin embargo, su recorrido por la montaña no se limitó solamente a esta carrera, apodada el ‘Dakar del ciclismo’. Heras también compitió en otros campeonatos internacionales, como podría ser el caso de la Transpirenaica de Giant Tours.
De esta manera, el bejarano pudo disfrutar de esta modalidad que tantos beneficios puede llegar a tener para el que lo practique una vez decidió poner fin a su etapa como profesional en 2008. Un paso que también han probado otros ciclistas de ruta, pero al que no todos han llegado a adaptarse tan bien como Roberto.
Desde entonces, Heras saborea los días que sale a pedalear al campo con la “rueda gorda” por la naturaleza, disfrutando de paisajes y sendas únicas que antes no podía encontrar. Eso sí, siempre intentando minimizar el impacto, una cualidad importantísima en esta disciplina, la cual cada día está más arraigada entre sus participantes.
En resumen, Roberto Heras, uno de los ciclistas españoles más importantes en ruta, cuando decidió dejar de ser profesional, cambió la carretera y las largas etapas por otro modo de disfrutar sobre la bici. La montaña se abrió en su vida, ofreciéndole unos beneficios que antes, seguramente, no encontraba, lo que le llevó a aguantar unos pocos años más compitiendo y ganando sobre las dos ruedas, dejando su huella también en esa modalidad en un nivel, eso sí, algo más amateur.