Os presentamos a una auténtica Girl Power, todo un ejemplo a seguir. La conocimos en el pasado Girl Bike Weekend 2016 celebrado en el Bikepark de Vallnord. ¡¡¡Y nos dejo sin palabras!!! Sigue leyendo para conocerla mejor.

SAM_0576 - copia — Tania y su hermana gemela Nidia en el GBW 2016

Edad: 21

Nacionalidad: Española

Localidad de Residencia: Roquetes

¿Quien es Tania? Para que la gente te vaya conociendo.

Soy una chica de 21 años, estudiante de veterinaria, lesionada medular en accidente de tráfico desde hace muchos años, con bastantes aficiones y entre ellas está el “deporte ocasional”, como yo lo llamo.
¿Por qué elegiste este deporte?

Nunca me han gustado los deportes “convencionales” por así decirlo. Pero siempre me han llamado la atención los deportes más de riesgo o que den subidones de adrenalina. Además, mi padre empezó a practicar enduro y DH con su hermano, mi tío y sus amigos de “EnduBitem Btt”. Así que cuando Jabi de Handixtreme nos dio la oportunidad hace unos años de probar una silla para esto, pues lo aproveché.
¿Como empezaste, con qué edad y quien te inicio?

La primera vez que me subí a una silla de descenso fue cuando tenía unos 17 años. Yo, hasta entonces, siempre me había ido a esquiar con Handixtreme. Handix es una fundación que se dedica a realizar deportes de aventura adaptados (www.handixtreme.com). Desde el esquí hasta el descenso pasando por barrancos, escalada… Llevaba ya varios años yendo ahí y había confianza. Así que cuando Jabi (mi monitor de esquí y también el fundador de Handix) compró las sillas para hacer descenso nos propuso probarla, ya que sabía que mi padre hacía enduro.

Así que simplemente, como era un deporte que me llamaba bastante la atención, a mi padre le hacía ilusión y además me pareció un buen plan, pues fuimos a probarlo. A pesar de que me gustó y me lo pasé muy bien, la experiencia fue bastante dura, trabajamos con lo que teníamos por así decirlo y el terreno no era el de un bikepark, yo no hacía deporte habitualmente y básicamente acabé destrozadísima. Así que no volví a intentarlo hasta el día del GBW, y la experiencia fue totalmente distinta. Pude confirmar que este deporte me gusta y mientras tenga oportunidad subiré un par de veces en verano a seguir practicándolo.
Cuéntanos un poco sobre tu bici.

La bici es propiedad de Handix, es muy sencilla y únicamente sirve para bajar. Básicamente, tiene cuatro ruedas con tacos, unas grandes detrás y otras más pequeñas delante, con un freno de disco por cada rueda. También tiene cuatro amortiguadores, un manillar de bici normal en dónde están los frenos que se usan como en una bici común.

El asiento es el mismo que se usa en las sillas de esquí. Lo más destacable es que dispone de un sistema para poder subir al telesillas que permite elevar la silla, apoyarla en unas ruedecitas que tiene detrás y doblar las grandes, de manera que quedo yo sentada en la silla y en el telesillas, es bastante curioso. Luego, como he dicho solo sirve para bajar ya que no dispone de ningún mecanismo para propulsarme sola, como mucho puedo empujar las ruedas de detrás pero debe pesar como 50 kg más o menos, así que lógicamente en subidas o sitios demasiado llanos toca que te ayuden. Es muy importante controlar las inercias para conseguir velocidad suficiente para que no quede parada y necesite del empujón.
Hace poco participaste en el Girl Bike Weekend 2016 ¿Como fue tu experiencia?

¡Estuvo genial! Fueron dos días en el bikepark haciendo bajadas y, como dije en todo momento, si tengo la oportunidad de repetir en el GBW 2017, volveré a ir seguro.

La organización se preocupó mucho de que todo estuviese correcto en todo momento y que no hubiese ningún problema, realmente hubo muchísimo interés y se agradece un montón; incluso en la barbacoa que se hizo en sábado se preocuparon de que mi hermana y yo pudiésemos comer, ya que eramos las únicas vegetarianas. Hay muy buen rollo en todo momento, tienes la oportunidad de conocer a mujeres muy distintas, con diferentes niveles de afición a este deporte pero todas muy valientes y también los chicos fueron una pasada. Te sentías a gusto en todo momento y para que yo diga eso es difícil, ya que realmente soy bastante tímida e introvertida. Así que animo a las chicas que tengan curiosidad por este deporte o que ya lo practiquen a que se apunten ellas y sus acompañantes en 2017 que seguro se lo van a pasar guay.
Creo que tuvisteis que pedir permiso a la estación para poder participar. Cuéntanos como vistes el tema de acceso/pistas para discapacitados.

Permiso exactamente, no. El tema fue que mi padre estuvo en contacto con Vallnord para avisar de que participaría en el evento y para ver como estaba el tema de adaptaciones y además creo que también avisaron la organización del GBW.

El único inconveniente que podía haber así serio era el de subir en el telesillas, pues tienen que tener ciertas medidas que dicta la homologación y que pocas estaciones tienen con exactitud. Solo pude acceder al primer telesillas. Al que sube hasta el “cubil” no se podía porque la silla tocaba totalmente al suelo y era físicamente imposible. Pero en el primero si que pude, con un poco de ayuda y, realmente, por parte de Vallnord hubo una disposición total a la hora de ayudar. Fue genial. Pusieron mucho interés y estuvieron muy atentos a que todo fuese bien. El personal del telesillas fue muy amable en todo momento y ayudaron un montón; y también ayudaron las compañeras del GBW y los clientes del bikepark que tuvieron mucha paciencia cuando teníamos que parar el telesilla para subir. A decir verdad lo siento mucho por ellos, pero no hay otra forma.

En general, en el bikepark fue muy bien. Les doy una nota positiva, aunque me parece que era la primera vez que se topaban con una silla así y las primeras veces siempre son difíciles. Las pequeñas cosas que hay que mejorar como lo de subir al segundo telesillas y poco más. Me dio la sensación de que en cuanto tengan oportunidad lo arreglarán, ya que por su forma de actuar se les notaba que querían mejorar en todo lo posible. De echo me hicieron unas fotos en el telesilla que creo que servirán para eso, aunque solo son suposiciones.
¿Qué mejorarías para que los Bike Park estén adaptados?

Bueno, teniendo en cuenta que solo he ido a Vallnord, porque la primera vez no fue en un bikepark, no puedo opinar mucho. Pero creo que simplemente lo que hay que asegurarse es que los telesillas estén a cierta altura. Es lo único que te condiciona, luego que disponga de algunas rutas con senda más o menos ancha. Tampoco mucho más. Como dice Jabi, “No podemos adaptar la montaña, nosotros debemos adaptarnos a ella”. Y luego lo típico de todas partes, rampas para acceder a los sitios y baños adaptados. Algo que al menos en Vallnord, se cumple.
Cuéntanos como es un día con Tania.

Un día normal conmigo es bastante aburrido, me levanto rápido para ir a la facultad, hago prácticas, me voy a comer a mi piso con mi hermana o si no me da tiempo me voy a algún lugar del edificio a leer. Voy a clase, vuelvo al piso y si tengo trabajo urgente lo hago. Si hay algún plan salimos por ahí, hago mis ejercicios si me acuerdo o sino también me pongo a jugar a videojuegos online con mi hermana y mis amigos. Solo paro para cenar y sigo hasta que se hace de madrugada y me voy a dormir.

Si estoy en mi ciudad, la cosa cambia. Paso el tiempo dedicándome a mis aficiones. Voy al fisioterapeuta, paso el rato en la asociación de juegos de mesa y rol “Gremi Lúdic Despertaferro”. Hago cosas de animalistas ya que me encantan los animales. Estudio japonés, hacemos alguna sesión de ejercicio con mi hermana. Voy al campo a trabajar en lo que puedo con mi abuela, monto planes con mis amigos… lo típico creo.
¿Realizas otros deportes?

Esquí cuando tengo ocasión y poco más. La verdad es que le recomiendo a todo el mundo que haga algún deporte. Es muy enriquecedor y da mucha disciplina pero, a pesar de que me avergüenza un poco decirlo, soy del tipo de persona perezosa y poco disciplinada. Así que la constancia no es lo mío y por lo tanto el entrenamiento tampoco. Por eso solo práctico los “deportes ocasionales”, voy, libero el estrés y me vuelvo a casa.

¿Qué les dirías a todas esas personas que se quedan en casa porque creen que no van a poder hacer lo que se proponen?

Bueno, yo creo que cada uno es libre de hacer lo que crea conveniente. Pero lo cierto es que quién no las hace no las cuenta, con lo que simplemente hay que hacer lo que a uno le apetezca sin tener en cuenta mucho más. Siempre digo lo mismo, no hay que pensar mucho las cosas, sino te agobias y no haces nada.

La gracia de hacer cosas es intentarlo. A veces no salen los planes como uno quiere. Pero yo cuando hago un plan ya me lo estoy pasando bien montándolo y solucionando los problemas que van apareciendo. Que sale bien pues genial, sino tengo una buena experiencia igual y no puedo arrepentirme de no haberlo intentado. Hay que vivir y, si algo pienso que a lo mejor no puedo hacerlo, me digo a mi misma: “¡Venga Tania, con dos cojones y medio cerebro!”. Aunque suene mal funciona, me lanzo y veo qué pasa.